sábado, 15 de septiembre de 2007

Pesadilla en Elm Street 2: La venganza de Freddy



La película "Pesadilla en Elm Street fue un éxito. Dio un gran empujón a la carrera de su director, y convirtió a Robert Englund en el mejor villano que había existido en mucho tiempo. La New Line Cinema se convirtió en una productora de primera fila. El productor Robert Shaye decidió que había que explotar la gallina de los huevos de oro cuanto antes, y en menos de un año ya se estaba preparando una secuela. Craven se desvinculó del proyecto al no gustarle el cauce que tomaba el guión, y el director fue Jack Sholder, un desconocido que imprime a sus películas bastante singularidad (suya es la popular Hidden, Oculto).
Mucha gente opina, de forma casi unánime, que esta es la peor secuela de toda la serie. Es una opinión que no comparto, el puesto de peor entrega se lo disputan entre la quinta y sexta entregas, en dura pugna. El mayor fallo de esta secuela es que New Line decidió darle un enfoque totalmente distinto al de su antecesora (idea loable) pero se equivocó en algunos puntos. A pesar de todo, la película tiene la mejor banda sonora de toda la serie, y pese a quien pese, algunas de sus escenas se han convertido en clásicos (la del autobús especialmente).
Se nos traslada a Sprinwood, pueblo donde sucedió todo en la primera parte, aunque en la peli de Craven nunca se especificaba de qué pueblo se trataba. Se nos informa de que han pasado cinco años desde que Nancy diera la espalda a Krueger. Ahora, otra familia, los Walsh, se muda a la casa que habitó Nancy con su madre, donde todavía mora Krueger, esperando a su próxima víctima. Jesse, el hijo adolescente de la familia, será su objetivo.
A partir de entonces, Jesse las pasará putas, teniendo toda clase de pesadillas en las que Freddy, en lugar de atacarle, le pide que mate por él. "Tú tienes el cuerpo, y yo tengo el cerebro" le dice al muchacho en su primera aparición. Por cierto, aquí Freddy sigue manteniéndose en las sombras y lo suficientemente serio, con lo que todavía es capaz de asustar cuando aparece. jesse, poco a poco, va perdiendo su conexión con la realidad: su novia Lisa es incapaz de averiguar qué le sucede, su padre cree que es un delincuente que necesita mano dura, y su madre está angustiada, pensando que su hijo se está volviendo un enfermo mental. Finalmente, se suceden varios asesinatos, que, intuimos, ha cometido Jesse, con el guante de Freddy que encontró en el sótano.

Ups, debería haber girado a la derecha en Alburquerque...

Y finalmente, todo degenerará en una orgía de muertes durante una fiesta de adolescentes (claramente despiertos, por cierto). Freddy ya está en nuestro mundo. Lisa le persigue, creyendo todavía que puede salvar a su novio... la última media hora de película es incoherente, y bastante mala, pero la atmósfera de la película está muy conseguida, y recomendaría su visionado, siempre teniendo claro lo que se va a ver: una película fallida qe promete mucho en su comienzo, sigue prometiendo... y acaba por desinflarse justo cuando le tocaba poner toda la carne en el asador. Una pena.

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